Todos sabemos que hay películas que se deben ver en cuanto salen y otras que pueden esperar para verse en un viaje de carretera o de avión. Esta no está hecha para verla en un avión, para nada. Hablamos de la nueva joya de Netflix: La Sociedad de la Nieve, una cinta basada en hechos reales.
Esta es una historia conmovedora, triste y a la vez inspiradora que retoma una tragedia real dándole una perspectiva única que ha cautivado a la audiencia. El filme ha despertado un nuevo interés por la historia verdadera, sus supervivientes y ahora las nuevas caras que les dan vida en este largometraje cuidadosamente hecho y acreedor de un extenso reconocimiento.
¿Qué pasó en los Andes en 1972?
Para aquellos que quieran más contexto sobre la historia real, ésta narra cómo el equipo de rugby uruguayo Old Christians Club sufrieron un accidente de avión camino a Chile y estuvieron varados en la cordillera de los Andes en 1972. En este accidente fallecieron un total de 29 personas y no serían rescatados hasta casi tres meses después.
La cinta se basa en el libro homónimo que a su vez recupera los hechos reales de la tragedia. Cabe destacar que esta es la tercera interpretación de esta historia en la pantalla grande con Supervivientes y ¡Alive! (hechas en el 1976 y 1993, respectivamente). Ahora el director español J.A. Bayona nos entrega esta iteración que promete ser la definitiva de “Los héroes de los Andes”.
Gran fidelidad y proezas técnicas
Las narrativas que siguen el modelo de hombre contra naturaleza ayudan a que cualquiera pueda ponerse en el lugar de los protagonistas. Bayona no es ningún turista perdido en este territorio. Gracias a su trabajo previo en The Imposible, dejó en claro que es especialmente hábil para desarrollar este tipo de películas. Desde el hambre, el frío extremo y esos escasos, pero significativos destellos de alegría y esperanza en la que los chicos pueden dejar de ser supervivientes y volver a ser jóvenes con la vida por delante, todas estas facetas son mostradas puramente.
Los realizadores comprendieron muy bien que este filme no necesitaba acción hollywoodense o momentos innecesariamente melodramáticos. Esta historia exigía contar lo que pasó en realidad, con respeto y fidelidad a los eventos. Cuidar minuciosamente cada engranaje de esta gran maquinaria para entregarnos una increíble odisea.
La búsqueda por transmitir la realidad
Que esté basada en hechos reales ayudó a los involucrados a dar un esfuerzo descomunal para que sintiéramos la cinta lo más apegada posible a lo acontecido. El equipo se tomó tan enserio esta misión que recrearon las fotos que los jóvenes verdaderamente tomaron. Además de que respetaron todos los nombres de los tripulantes y pasajeros del avión, detalle que en anteriores versiones se vio modificado o plenamente omitido. Además de que los actores mantuvieron una íntima relación con los supervivientes que interpretaron.
Siguiendo el objetivo, optaron por el uso de sets reales y de locaciones. Se utilizó metraje verdadero del Valle de las Lágrimas en los Andes, locación exacta del accidente. Construyeron escenarios tanto del avión al momento de su choque, como del fuselaje en el que se resguardaron por 72 días.
El diseño de sonido y efectos prácticos ayudan enormemente a la inmersión del paisaje y a sentir la desesperación y claustrofobia que sufren nuestros personajes. La audiencia abrazó de mejor forma un mayor realismo en la medida de lo posible, lo cual fue un acierto rotundo.
Aquellos que aprecien la fidelidad de una adaptación del libro a la pantalla se encontrarán especialmente satisfechos. El filme es francamente leal a la novela, la cual de por sí ya era sumamente fiel a la historia real. Lo que resulta en un largometraje casi documental de lo sucedido en los Andes, de lo que vivieron y sintieron los miembros de la sociedad. La cinta también da una clase de cierre a las familias de los fallecidos.
Si bien nuestro narrador es el joven Numa Turcatti, no se siente como tal un solo personaje principal, sino que es el esfuerzo colectivo de todos los muchachos para mantenerse vivos. La camaradería y el anhelo de sobrevivir de los jóvenes es una maravilla de ver que puede apelar a absolutamente cualquier espectador. Verdaderamente formaron un lazo inquebrantable después de ser abandonados por los equipos de búsqueda. Aquí se reafirma que todos fueron una parte esencial para la subsistencia del grupo. Esto puede ser desde intentando arreglar la radio, en los cuidados médicos hasta las expediciones. Todos y cada uno no dudó ni un segundo en ayudar al grupo.
Hermandad en la montaña y en el set
Destacando las actuaciones de Enzo Vogrincic como Numa, Matías Recalt a cargo de encarnar a Roberto Canessa y Agustin Pardella intrerpretándo a Nando Parrado. Sin dejar atrás a ninguno de los otros miembros del reparto, ya que sus actuaciones también fueron absolutamente comprometidas. También hay que reconocer el esfuerzo del departamento de maquillaje, quienes prestaron especial atención incluso a las minuciosidades en las lesiones que sufrieron los supervivientes.
Otra excelente decisión del departamento de casting es que, al ser actores uruguayos y argentinos, se crea un realismo y una cercanía sin igual. Esto le ofrece algo tanto a los espectadores primerizos como a los ya conocedores, pero sobre todo a los supervivientes y familiares de aquellos que no lograron volver.
Giacchino inspirándote a sobrevivir
No podemos dejar pasar el soundtrack de Michael Giacchino que maneja perfectamente la desolación y la esperanza utilizando primordialmente piano, cuerdas y coros para envolver aún más al espectador en este bellamente aterrador paisaje, añadiendo otra gran capa de emocionalidad a esta historia. En cada escena que se puede escuchar su composición es indiscutible el poder que carga y aporta al largometraje.
Una cinta hecha para la pantalla grande
Si bien es muy cómodo ver una película desde casa, creo que esta cinta debería ser vista en una pantalla grande. El filme estuvo disponible en cines por un tiempo muy limitado, ya que en menos de un mes después de su estreno fue liberada en Netflix. Si tienen la posibilidad vean esta cinta en la pantalla más grande que tengan ya que lo merece totalmente. Firmemente, espero que le den su merecido relanzamiento a las pantallas de cines, como ya lo han hecho con otras de sus compañeras nominadas de esta temporada.
Para aquellos que, como su servidor, se quedaron intrigados por esta increíble historia, les invito ampliamente a ver los muchos documentales de los supervivientes, así como leer la propia novela. Siguiendo con las películas de desastres basadas en hecho reales, también les recomiendo la ya mencionada The Impossible del mismo Bayona.
Altamente imperdible
A mi parecer, esta cinta es por mucho la mejor de este suceso, no solo por su fiel empeño para apegarse a los hechos reales, sino también por sus actuaciones y sus elementos técnicos. Esta historia es una muestra de la fuerza de voluntad que tiene el hombre frente a las más adversas condiciones, a las enormes ganas de vivir que se tienen cuando uno es joven, la terca negación a rendirse y del amor por los amigos. Una película que definitivamente le hará a quien la vea apreciar aquello que nos hace sobrevivir el día a día y muy seguramente a tenerle un miedo muy grande a viajar en avión. Un milagro o una tragedia, sin duda alguna es una tremenda película.
La Sociedad de la Nieve se encuentra disponible en Netflix. En los premios Óscar 2024 está nominada a Mejor Película Extranjera y recién ganadora de 12 premios Goya, incluidos a Mejor Película, Mejor Actuación Revelación y Mejor Director.