Henry Kissinger, el 56º Secretario de Estado de Estados Unidos (EEUU) falleció en su casa ubicada en Conneticut a siete meses de haber cumplido 100 años. El diplomático fue una de las personas más influyentes políticamente durante su vida profesional.

«El Dr. Henry Kissinger, un respetado académico y estadista estadounidense, murió hoy en su residencia en Connecticut», informó Kissinger Associates en un comunicado el miércoles 29 de noviembre por la noche, de acuerdo con AFP.

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Rol en la política

Kissinger es reconocido como una de las personas más importantes en el seno de la diplomacia estadounidense en el siglo XX. Durante este período Estados Unidos recuperó muchas relaciones con otros países.

Como Asesor de Seguridad Nacional y luego Secretario de Estado durante las administraciones de Richard Nixon y Gerald Ford, el Dr. Kissinger fue el autor de algunas de las políticas importantes de esos mandatos.

Asimismo, el político fue parte importante para que las relaciones de EEUU y la Unión Soviética llegaran a un buen punto o al menos existiera menos tensión durante la Guerra Fría.

«El nombre de Henry Kissinger está indisolublemente ligado a su política exterior pragmática, que en su momento allanó el camino para una distensión de las tensiones internacionales y permitió alcanzar los acuerdos soviético-estadounidenses más importantes que contribuyeron al fortalecimiento de la seguridad global», dijo Valdimir Putin según un comunicado difundido por el Kremlin.

De igual manera, jugo un papel fundamental en la apertura de China al mundo occidental. Las conexiones que mantenía con burócratas de dicho país fueron sustanciales para mejorar las relaciones entre EEUU y la nación asiática.

En la época de los 70 el diplomático realizó viajes secretos y logró organizar la visita histórica de Nixon a Pekín en 1972, según recoge AFP.

«Es una enorme pérdida para nuestros dos países y para el mundo», escribió en X (antes Twitter) el embajador de China en Washington, Xie Feng, quien se dijo «profundamente triste».

«La historia recordará cómo el centenario contribuyó en las relaciones China-EEUU», comentó el embajador, en la primera reacción oficial de China al fallecimiento.

Premio Nobel

La firma de los acuerdos de París fueron fundamentales para que se reinstaurara la paz entre EEUU y Vietnam después de una guerra que dejo más de 2.5 millones de muertos. Gracias a su gran capacidad de conciliación, Kissinger fue fundamental en las negociaciones de este convenio.

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Es por eso que el diplomático de origen alemán obtuvo el Premio Nobel de la Paz en 1973 el cual compartió con el político y militar vietnamita Le Duc Tho.

Informe Kissinger

A pesar de estas acciones, vistas como positivas para el mundo, el diplomático es un personaje considerado polémico por muchos otros actos, dentro de ellos se encuentran los relatados en documentos como el «Informe Kissinger» o «Informe sobre Seguridad Nacional 200 (NSSM 200).

Dicho documento hablaba de los intereses norteamericanos para controlar la sobre población en el mundo evitar que hubiera revueltas sociales que pudieran llegar a causar inestabilidad política internacional.

Kissinger, según se desprende del llamado ‘informe Kissinger’, fue uno de los principales responsables de las campañas de control natal desplegadas en los años 70 en toda Latinoamérica: esterilizaciones masivas de mujeres (muchas voces denunciaron este hecho y la violencia con la que se realizó) entre otros.

Explica José Jorge Quesada, coordinador académico de Humanidades de la Preparatoria Panamericana.

Influencia en Latinoamerica

En otros documentos que fueron desclasificando por Estados Unidos, también se puede encontrar que Henry Kissinger tuvo una participación importante en la promoción de regímenes dictatoriales en América Latina, así como en proyectos contra movimientos de izquierda, los cuales derivaron en violaciones de derechos humanos.

Kissinger apoyó el golpe militar que encabezó el general Augusto Pinochet en Chile contra el gobierno del socialista Salvador Allende en 1973, además de gobiernos dictatoriales como los de Brasil y el de Anastasio Somoza, en Nicaragua.

En este sentido, algunos elogios y visión a Kissinger tras su muerte contrastan con el silencio o algunos comentarios en América Latina como los del embajador de Chile.

«Ha muerto un hombre cuyo brillo histórico no consiguió jamás esconder su profunda miseria moral. K», comentó en su cuenta de X Juan Gabriel Valdés, embajador de Chile en Washington.

«Para Kissinger, América Latina fue una pieza en el cuadro geoestratégico global. La guerra contra el comunismo fue su única prioridad. Todas las demás consideraciones tenían poca importancia», dijo a la AFP Michael Shifter, expresidente del centro de estudios Diálogo Interamericano y profesor de la Universidad de Georgetown.

«En ese contexto, Kissinger fue indiferente a las violaciones de los derechos humanos bajo gobiernos militares en la región», expresó