Tras posicionarse como uno de los cantantes de reggaeton más influyentes, J Balvin, en septiembre de 2021 publicó José Un álbum que recopila los sonidos que lo han acompañado en cada una de las facetas de su carrera.

EDM, popeton, reggeaton y trap, son los colores que Balvin presenta a lo largo de 24 canciones de este disco. Tiene colaboraciones con: Khalid, Skrillex, Jhay Cortez, Dua Lipa, Bad Bunny, Yandel, Tokischa, María Becerra y más.

Modo leyenda

“¿Sabes lo que es llenar estadios con un repertorio donde el 80% del mismo no ha sonado en la radio? Yo sí, nadie tiene que decirme que soy una leyenda.”

 F40 ft. Arcangel.

El inicio del disco se da con “F40” donde Balvin se proclama a sí mismo como leyenda del Reggaeton. Utilizando a Arcangel para hablar de lo que es una leyenda. Marcando su relevancia y mencionando a sí mismo como pieza clave del género en el escenario mundial.

Monotonía

Tras un inicio, fuerte, esperanzador y creativo, el disco se torna repetitivo con ritmos de dembow y de fiesta, convirtiéndose en una mezcla empalagosa de sonidos. Utiliza el Popeton, una fórmula que ha repetido en todos sus proyectos, en donde habla de desamor, amor y referencias sexuales, acompañado de melodías. 

Hasta la mitad del disco, sigue esta monotonía. “Ganas de Verte”, “Vestido”, “Si te atreves”, “Fantasías», “Pa´Guayarte” con Ozuna y “Otra noche sin ti” con Khalid establecen este formato quemado, que hace cinco años hubiera funcionado.

Dentro de esta dulcería, hay un dulce que se distingue con un sabor diferente, “In Da Ghetto” con Skrillex, un EDM que recuerda a “RITMO”, con The Black Eyed Peas. Una receta mainstream que mezcla dos influencias de distintos géneros, experiencia no empalagosa que, sin ser original, brinda una textura diferente. 

Colaboraciones

Ya mencionamos algunas de las colaboraciones de este disco, pero son contadas las propuestas que destacan y marcan algo diferente. Dentro del setlist tenemos propuestas que dieron la vuelta al mundo, pero en el disco están de sobra. “One Day” con Dua Lipa, Bad Bunny y Tainy y “Poblado remix” donde participan Karol G, Nicky Jam, Crissin, Totoy El Frío y Natan & Shander son canciones que tuvieron impacto como sencillos, pero no aportan esencia dentro de José.

Las novedades recaen en “Qué más pues” junto con María Becerra y la polémica colaboración “Perra” con Tokischa que en lugar de destacar por aspectos musicales, fue puesta en el spotlight por la connotación machista y de cosificación hacía la mujer. 

La intimidad de José

El lado personal se hizo presente solamente en cuatro canciones de José, cuando se supone que la intención de J Balvin era retratarse como quien realmente es y no como la estrella del generó urbano latino que todo el mundo ya conoce. 

Aún con esto, en estas cuatro composiciones realmente se logra conocer un poco más de la intimidad de José. Particularmente, “7 de mayo” es una especie de carta donde José plasma sus sueños, anhelos y experiencias personales. Otro ejemplo de este retrato personal, es “Querido Río”, dedicada a su hijo, donde rapea en una suave base con ecos de fondo, mientras unos ligeros pero graves riffs de guitarra eléctrica adornan y acompañan la voz de J Balvin. 

Una playlist más…

Para alguien como J Balvín, un creativo e innovador, el disco le quedó pequeño. Creo que la intención era buscar marcar su esencia y mostrar lo que José es. Brindó una playlist para la fiesta, algo que en el género se ha hecho costumbre, en lugar de buscar sacar su mejor versión e ilustrarnos lo que realmente puede llegar a ser y mostrar un statement de “leyenda”.

Un proyecto que ha pasado de noche. J Balvin ahora brilla y brillará más por sus colaboraciones y tendencias fuera de la música. Salvo que en los próximos años nos brinde un proyecto de época, donde realmente demuestre que puede estar al nivel de leyendas como: Daddy Yankee, Arcangel, Bad Bunny y Tego Calderón.