En una época en la que todas las personas con un smartphone pueden acceder a una cámara con tan solo un clic, se podría pensar que la fotografía como una forma de arte va en decadencia, no obstante, este no es el caso.
Para entender quién es realmente un fotógrafo es necesario profundizar en la esencia de esta disciplina. Es por eso que entrevistamos al doctor Óscar Colorado, profesor de Fotografía Avanzada de la Universidad Panamericana, y un prolífico autor que además tiene una amplía carrera como académico y practicante de la fotografía.
La cámara no te hace fotógrafo
Para dar inicio con nuestra entrevista le preguntamos al autor y creador del sitio oscarenfotos si cualquier persona que tenga una cámara en la mano es un fotógrafo.
“Esta es una muy buena pregunta. Un ejemplo útil podría ser el caso de un violín», comenta el doctor Colorado.
El profesor empieza con una pregunta sencilla.
«¿Qué sucedería? Si una persona común y corriente toma en su mano un violín ¿sería un violinista? La respuesta es no. Existe un proceso por el que tiene que pasar, el dueño de un violín n0 se convierte en un violinista, es la práctica la que lo convierte en un músico capaz de transmitir sentimientos a través de las melodías que salen de su instrumento», explica.
El doctor Colorado asegura que lo que sucede con la fotografía es que la cámara es muy fácil de usar. La primera vez que tomas un violín y pasas el arco por el instrumento sin saber cómo funciona correctamente, un sonido molesto saldrá de este. Con una cámara es distinto, simplemente presionas un botón, direccionas con tu mano el lente a lo que quieres fotografiar y listo.
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El doctor Colorado explica que «tienes que ir afinando poco a poco hasta que puedas empezar a tocar piezas muy bonitas y salgan bien; así pasa con la fotografía». Según Óscar, lo maravilloso de capturar imágenes es que conforme vas profundizando, te das cuenta de que es más complejo e interesante y que cada vez se pone mejor.
«Conocer ese lenguaje es lo que hace la diferencia entre una foto que simplemente te gustó a una foto que ves en el periódico”, señaló Colorado.
Dorothea Lange Destitute pea pickers in California.
Levantar imagen
A este proceso de recoger el objeto que tienes en frente de la cámara se le llama “levantar la imagen”, y no tiene ninguna complejidad. El profesor Óscar cita a Amsel Adams, un reconocido fotógrafo estadounidense, que solía decir que si hacer fotografías fuera más difícil, probablemente haríamos mejores, porque como es algo que hacemos tan automáticamente y el proceso es muy sencillo, pensamos que cualquiera lo puede hacer.
Gracias a la calidad de nuestros smartphones nos hemos acostumbrado a obtener buenos resultados en pocos minutos, por lo que se llega a pensar que es de lo más sencillo. Un verdadero fotógrafo sabe que se tienen que planear muchas cosas al momento de encuadrar un objeto que queremos retratar: ¿cuál será la mejor postura? ¿hay buena iluminación? ¿qué plano puedo usar para acentuar un gesto? Estas son algunas cuestiones básicas que cualquier fotógrafo, ya sea emergente o que lleve unos años, debe de conocer y que muchas veces las personas aficionadas a la fotografía no toman en cuenta.
“La verdadera fotografía requiere un conocimiento: pensar qué quiero tomar, un punto de interés, una armonía que se busca, el aprovechamiento de la luz, el tipo de encuadre, los planos y que dicen estos de la imagen. Cuando se levanta la imagen no se piensa en ninguno de estos temas”, remarcó Óscar
La fotografía es mucho más compleja, posee valor informativo y un pasado histórico. El profesor señaló cómo en la Universidad Panamericana se enseña fotografía desde primer semestre, precisamente porque a través de esta herramienta se pueden generar mensajes comunicativos de impacto. Ya sea para mostrar una injusticia, señalar la belleza de un objeto o retratar lo que está ocurriendo en el momento.
La fotografía es verdaderamente una expresión poderosa. Una imagen dice más que mil palabras.
Robert Doisneau Pipi Pigeon 1964
Las tres categorías
Óscar comentó que hay tres categorías en las que se podría clasificar a las personas que utilizan una cámara. Ya sea una cámara Réflex o un iPhone, el verdadero fotógrafo tiene que pasar por un proceso de selección creativo para «congelar» una realidad en segundos, que pueda hablar por sí misma y cuente una historia.
- La fotografía de aficionado: esta siempre ha existido y abarca desde las fotos que se toman en viajes familiares, hasta las imágenes que alguien toma de manera casual en una salida con amigos.
- Los fotógrafos emergentes: son los que se encuentran aprendiendo las técnicas y que quieren decir cosas nuevas a través de su cámara.
- Los fotógrafos: Para Óscar, un fotógrafo debe tener ese concepto que denomina como “conciencia”, es decir, que esté consciente de lo que está haciendo con la imagen y que tenga control sobre la herramienta.
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Ojo, mente y corazón
Citando a Henri Cartier Breson, Óscar señaló un ejemplo de la definición de fotografía que “le encanta”:
“Hacer fotografía es poner en un mismo eje, ojo, mente y corazón”.
Esto significa que cuando tienes una cámara en la mano estás utilizando la mente, porque necesitas utilizar herramientas intelectuales como en el caso del encuadre; el ojo, para decir qué es importante e interesante, y por último el corazón, es decir, retratar elementos que sean significativos para ti, que te importen, te den gusto o incluso que odies.
“Las fotografías no se toman, las fotografías se hacen”
– Ansel Adams
Fotografía Ansel Adams
Como en cualquier arte, la persona que esté interesada en ser un fotógrafo debe conocer su pasado, practicar las diferentes técnicas y tomas, pero sobretodo, desarrollar este sentido de «conciencia» transformadora que señalaba Óscar.
Un verdadero fotógrafo, ya sea emergente o profesional, debe retratar una realidad que denote injusticia, sentimientos, hechos memorables , fenómenos humanos o naturales, que cualquiera pueda captar al momento de que su ojo haga contacto con esa imagen y se sienta transportado al momento en el que el fotógrafo decidió realizar ese «clic».
