Tampa, EU.- La instalación de grandes parques eólicos y solares en el desierto de Sahara podría reducir el calentamiento global y aumentar de una manera pequeña, pero valiosa, las lluvias en dicha región, informaron investigadores estadounidenses.

El estudio fue publicado donde se informó de este hallazgo en el periódico científico Science. Está basado en simulaciones informáticas sobre lo que supondría cubrir con paneles solares y 3 millones de turbinas de viento, un 20 por ciento del desierto más grande del planeta.

Un parque solar y eólico de más de 9 millones de kilómetros cuadrados sería “en esa escala, suficiente para abastecer de energía al mundo entero”, indica el informe.

Los investigadores descubrieron que los cambios en el desierto generados a partir de las instalaciones eólicas y solares serían positivos, e incrementarían el crecimiento de plantas cerca de esos parques.

De acuerdo con las simulaciones del modelo, el efecto que generarían el parque eólico y el solar juntos, provocaría que el número de lluvias promedio en el Sahara aumentara de 0.24 milímetros por día a 0.59 milímetros.

Sin embargo, el impacto no fue uniforme en todo el desierto. La zona con más precipitaciones sería la de Sahel, región semiárida que se extiende desde Senegal a Sudán.

Según la investigación, esto sería lo suficientemente grande como para tener un gran impacto ecológico, ambiental y social.

“La mayor parte del Sahara se mantendría extremadamente seca”, señaló Daniel Kirk-Davidoff, coautor del estudio y profesor de la Universidad de Maryland.

El aceleramiento en el crecimiento de las plantas derivado de las lluvias a lo largo del extremo sur de la región seca de África permitiría un mayor pastoreo, comentó Kirk-Davidoff mediante un correo electrónico. “Es difícil que esto fuera algo malo para las comunidades de la zona”.

El cambio tiene que ver con la forma en que los parques eólicos aportan aire caliente desde arriba, particularmente por la noche, lo que puede aumentar la evaporación y el crecimiento de las plantas. Este intercambio de aire también puede duplicar las precipitaciones diarias.

Adicionalmente, los investigadores resaltaron que la temperatura más alta generada en estos parques se limitaría a un área geográfica, en comparación con las emisiones de combustibles fósiles que se acumulan en la atmósfera y aumentan el calentamiento global.

“El aumento de la lluvia y la vegetación, combinado con electricidad limpia proveniente de fuentes de energía solar y eólica, podrían ayudar a la agricultura, el desarrollo económico y el bienestar en el Sahara, Sahel, Medio Oriente y otras regiones cercanas”, mencionó Safa Motesharrei, también coautor del estudio e investigador de la Universidad de Maryland.

Fotografía obtenida de: BBC / Cultura Colectiva