Estamos en la necesidad como humanidad de buscar revertir la alarmante situación que vive nuestro planeta. Los desechos de la tecnología llegan a ser muy dañinos para el medio ambiente y la comunidad científica ha tomado cartas en el asunto. Investigadores de la Universidad de Duke en Estados Unidos han logrado desarrollar el primer dispositivo electrónico 100 por ciento reciclable, todo gracias a una impresora 3D ecológica. Te contamos todo a continuación sobre este revolucionario invento.
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La impresión de un dispositivo electrónico reciclable
Por si sola, la tecnología de la impresión 3D es increíble. Que se materialicen los proyectos en cuestión de horas, solo con contar con una impresora de esta índole, era simplemente impensable hace algunos años. Pero es aún más irreal, que ahora esta tecnología pueda crear dispositivos totalmente reciclables. Científicos de la Universidad de Duke publicaron en la conocida revista Nature, la realización de un dispositivo capaz de ser reutilizado en múltiples ocasiones y en diferentes usos. En este caso, crearon un transistor de un ordenador.
No plantean reemplazar a los componentes de los aparatos electrónicos actuales, hechos de silicio. Pero sí planean que en el futuro puedan ser parte de la conformación de nuevas tecnologías, como el Internet de las cosas y el 5G. Sería de gran ayuda para la industria. Se puede masificar, sin la preocupación de una posible contaminación. Lo anterior, marca un comienzo de lo que puede suceder en el futuro. Las posibilidades de su uso son infinitas.
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¿De qué está hecho?
Para realizar la impresión del dispositivo electrónico, los investigadores usaron una impresora 3D y una superficie de papel hecho de materiales igualmente reciclados o ecológicos. Se utilizaron tres tintas hechas de carbono. Los primeros dos materiales ya habían sido utilizados para experimentos similares y sirvieron como un cimiento. Las tintas en cuestión son: nanotubos de carbono y tintas grafeno.
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El tercer material, nunca se había usado para la impresión y su función normalmente es un aislante electrónico. Es la nanocelulosa, que es biodegradable y un derivado de la madera. Posterior a su creación, se puso a prueba al dispositivo y se determinó que se pudieron recuperar casi el 100 por ciento de los componentes. No perdieron sus respectivas características. Pueden ser reutilizados posteriormente para otra impresión.
