¡Malas noticias para Facebook! Tras los múltiples cambios que hemos vivido en los seis meses que llevamos del 2020, ahora se suma a la lista otro asunto. Las grandes corporaciones se suman al cambio, exigiendo la eliminación de discursos de odio en el mundo.
Lo que está pasando con Facebook
Por primera vez en la historia de la red social más famosa del mundo, se enfrenta a un boicot organizado por algunos de sus más grandes anunciantes con el lema #StopHateforProfit. Ya que a partir del 1 de julio, grandes empresas, tales como Coca-Cola, Microsoft y Starbucks, dejarán de gastar su dinero de publicidad en esta red social.
Y las empresas anteriormente mencionadas, no son las únicas que están decididas a retirar su inversión de Facebook. Son más, pertenecientes a distintas industrias y con giros diferentes, tales como Honda, Hershey, Verizon, KIND y el minorista, Target. Target dijo que usaría la pausa de julio en publicidad, «para reevaluar nuestros planes para el resto del año».
Mientras que el fundador de la marca de bocadillos KIND, Daniel Lubetzky, escribió en su cuenta de Linkdln: «Si Facebook no realiza esfuerzos visibles, medibles y asertivos para prevenir efectivamente la promoción del odio, la división, la difamación y la información errónea, para finales de este año 0, nos sentiremos obligados a evaluar suspender indefinidamente nuestras inversiones en Facebook, hasta que lo hagan».
¿De qué se trata el boicot y el #StopHateforProfit?
Antes de continuar, debemos explicarte con detalle a que se refiere esto. El objetivo de la campaña #StopHateforProfit, es presionar al gigante de la redes sociales para que cambie la forma en que maneja el discurso de odio y la desinformación dentro de su plataforma. A diferencia de otras redes sociales como Twitter, que monitorea muy de cerca los discursos de odio, Facebook no tiene ninguna forma de evitarlos y suprimirlos. De hecho, muchas veces hacen dinero con ellos.
Las compañías ya mencionadas, más algunas otras, se comprometen a dejar de anunciarse en este espacio durante al menos un mes para mostrar su desacuerdo con la red social. Algunas compañías han llevado el boicot un paso más allá, retirando su publicidad de otras redes sociales, tales como Instagram.
El comienzo de este movimiento
Dicho movimiento comenzó con un campaña lanzada el 17 de junio, por una organización de derechos civiles que incluye a la Liga Antidifamación, la NAACP, Color of Change y Sleeping Giants.
En la campaña afirman que Facebook ha permitido que grupos de odio prosperen en su plataforma, con muchas personas uniéndose a grupos extremistas, debido a las herramientas propias de recomendación.
Lo que las empresas quieren que Facebook cambie
El grupo de empresas que se unen al boicot, tienen una lista con puntos que les gustaría que se cambien. Junto con los cambios en las políticas para evitar el discurso de odio y los algoritmos de actualización, la lista incluye la contratación de un ejecutivo con experiencia en derechos civiles, la realización de una auditoría externa de odio y desinformación y por último, reembolsos publicitarios cuando un anuncio se muestre junto a contenido de este tipo.
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Analizando un poco más el tema, podemos llegar a preguntarnos la razón por la cuál muchas empresas estén en la misma página de querer detener los discursos de odio en redes sociales. Y tal vez la respuesta tenga que ver con la pandemia y las dificultades, que hasta las empresas transnacionales han tenido que vivir.
Por lo que muchas de estas empresas han tenido que recortar gastos. Así que toman la opción de recortar el dinero invertido en publicidad en redes sociales. Pero también debemos considerar que sin publicidad, las ventas de sus productos bajan, por lo que no sería una movida inteligente.
Así que nos hacemos la pregunta ¿esto logrará un cambio? y en verdad, ¿lograrán hacer la diferencia?
La respuesta a esta pregunta es sencilla. Ya que un análisis realizado por Fortune, revela que se necesitarían miles de los ocho millones de anunciantes de Facebook para poder darle un golpe al gigante de las redes sociales. Por lo que estas empresas, por más grande que sean, no representan un problema a la plataforma.
El año pasado, la marca de Zuckerberg tuvo casi 70 mil millones en ingresos publicitarios, por lo que muchos analistas ven el boicot como algo simbólico. En este caso «simbólico» es una palabra clave. Al final del día el dinero no lo es todo, y una mala reputación y mala publicidad pueden significar algo más grande que sólo perder unos cuantos dólares. El tiempo es el que nos dirá si estos realmente sirvió de algo.
La respuesta de Facebook
La red social no se quedó con los brazos cruzados. Y la vicepresidenta de soluciones de marketing global de Facebook, Carolyn Everson, salió a dar la voz dijo en un comunicado que la compañía respeta las decisiones de las marcar. «Centrada en el importante trabajo de eliminar el discurso de odio y proporcionar información crítica sobre el voto», comentó. «
Agregó que estaba teniendo «conversaciones con los vendedores y las organizaciones de derechos civiles tratan de cómo, juntos, podemos ser una fuerza para el bien».
Por su parte el CEO, Mark Zuckerberg, dijo que la compañía estaba imponiendo nuevas restricciones al contenido de odio en los anuncios, prohibiendo explícitamente los anuncios que fomentan las divisiones raciales.
Otras empresas que se han unido al boicot
Aparte de las grandes empresas ya mencionadas, otras empresas se han sumado a la iniciativa de dejar de publicitarse en la red social durante el mes de julio, como parte de la campaña #StopHateforProfit.
-Porsche y Grupo Volkswagen
-Ben & Jerry´s
-Madewell
-The North Face
-Patagonia
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