El primer Paper Mario salió a la venta en 2001 para el sistema operativo de la Nintendo 64 y se volvió un éxito rotundo. Después de la salida de su último titulo, Paper Mario: Color Splashen 2016 en la Wii U, se ha especulado mucho sobre su nueva entrega y que se agregará. Y aunque a mucha gente le gusta cómo avanzó la serie, a muchos no les han convencido los cambios a los juegos anteriores.
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De un mundo 2-D a 3-D
Nuevos ambientes brillantes, enemigos entretenidos y una historia como las ya conocidas con el querido personaje, la entrega anterior se caracterizó por ser el primero en su clase por una alta calidad visual. Y la sexta entrega en la serie tiene esa misma cualidad. The Origami King ha tenido nuevas adiciones a su sistema, pero su combate adquiere un elemento puzzle:
Se basa en colocar a los enemigos en una placa rodante, con el objetivo de obtener combos con los enemigos. Al igual que los jefes, pero siendo Mario el que debe evitar los ataques.
Este sistema se vuelve mucho más estratégico, teniendo un nuevo modelo que se basa más en la lógica y la estrategia. Uno debe tener en cuenta la cantidad de «vueltas de rueda» tiene disponible para poder terminar la partida de manera exitosa.
¿Adición o perdida de Nintendo?
Mucha gente ha puesto en duda sobre la utilidad de este sistema de combate, ya que muchos creen que no agrega en verdad mucho al juego y convierte a la saga en algo bastante distinto a las anteriores entregas. El juego tiene un gran enfoque en estos ejercicios que adquieren más y más dificultad entre más se avanza. Puede que para muchos esto sea un gran problema, pero para otros es solo una mecánica más que diferenciara a The Origami King de otros Paper Mario.
Lo que no se le puede discutir es que Nintendo nos ha traído un nuevo ambiente colorido y la historia que aun llama la atención.
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