Votar suele ser considerado una obligación con el país, un trámite que implica hacer colas para registrarse y más filas para emitir el sufragio.
Sin embargo, cuando el proceso se mezcla con cerveza, buena comida y un ambiente animado, llega incluso a ser divertido.
Esta es la premisa con la que, desde hace años, los demócratas ubicados alrededor del mundo han buscado atraer votos de estadounidenses que viven fuera de su país.
Cumplir con esta misión es la labor de la organización Democrats Abroad, la cual tiene una fuerte presencia en la capital mexicana.
“Democrats Abroad es un ala oficial afiliada al Partido Demócratas de los Estados Unidos, así que no es solo algo local en la Ciudad de México, está en todo el mundo (…). Democrats Abroad ha estado aquí desde hace un largo tiempo”, explicó Doug Hall, director de comunicaciones de Democrats Abroad en la entidad.
Esta organización es ampliamente conocida entre los estadounidenses que viven en la capital debido a los eventos que organizan durante la época de las elecciones.
“En las elecciones de 2008, cuando Obama estaba postulándose para la presidencia, su hermana vino a la Ciudad de México y Democrats Abroad patrocinó un evento para recaudar fondos (…) y fue el evento para recaudar fondos para la campaña del presidente Obama más exitosa del mundo fuera de los Estados Unidos”, dijo Hall.
En este ciclo electoral, el seguimiento al primer debate entre la demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump fue organizado en un restaurante llamado “Pinche Gringo BBQ” en la colonia Narvarte. La invitación fue extendida a los estadounidenses que se encontraran en la Ciudad de México y a cualquier interesado en la política de Estados Unidos y las costillas BBQ. El restaurante estaba alumbrado por luces de baja intensidad y un letrero rojo fosforescente que iluminaba las mesas largas con la palabra “BBQ”.
“El dueño es americano. Nos ha apoyado mucho. Todos los sábados hay un evento de 12 a 2, donde hay gente aquí, igualmente que hoy, ayudando a que la gente se registre (para sufragar)”, comentó Julianna Cárcamo, voluntaria para registrar a los votantes.
El día del debate inaugural, la gente llegó poco a poco a partir de las 19:00 horas. Varios ya portaban pins y playeras que tenían escrito “Hillary Clinton 2016” en grande. En su mayoría eran personas de entre los 20 y 30 años de edad.
Conforme arribaban, algunos iban por sus costillas BBQ al carro metálico de comida fijo que está en medio del restaurante, mientras que otros pasaban a la mesa del registro de votos para ser auxiliados por miembros de la organización para poder enviar su voto.
“Recolectamos las aplicaciones aquí en este evento, y mañana las llevaremos a la embajada de Estados Unidos, y después lo que pasa es que la embajada los coloca en el correo diplomático (…) y el correo vuela de regreso a Estados Unidos en aviones del gobierno estadounidense (…) y la papeleta (de votación) llegará en alrededor de una semana, y eso es una gran ventaja”, explicó Doug Hall.
El proceso para votar puede llegar a ser muy complicado y confuso para aquellos que no están en Estados Unidos, detalló por su parte Julianna Cárcamo.
“Lo que está tratando de hacer (Democrats Abroad) es que la gente se entere de que puedes votar, que tienes derechos, que aunque puede ser un proceso un poco complicado, que puedes llegar a este tipo de eventos con gente joven, en un lugar donde los americanos se sienten relacionados de cierta manera con la comida, con la música, y que puedan pedir ayuda”, comentó la voluntaria.
Cada evento ha tenido éxito para atraer a más votantes. Los miembros de Democrats Abroad mencionaron que incluso ha habido más actividad de los demócratas en estas elecciones que en las pasadas debido a la preocupación de los estadounidenses por la candidatura de Trump.
“Donald Trump ha sido enviado por Dios para nuestros esfuerzos, pienso que los voluntarios han trabajado tremendamente para organizar un evento como este, que conlleva mucho trabajo, pero (…) pienso que Donald Trump ha sido de gran ayuda”, comentó el director de comunicaciones.
Veronica Reyes, vicepresidenta de Democrats Abroad en la Ciudad de México, también cree que Trump ha sido un incentivo para que la gente vote.
“Hemos visto muchas personas que han nacido en los Estados Unidos y han vivido los últimos 20, 30, 60 años aquí en México como mexicanos, y están saliendo para registrarse para votar y eso nos enseña que Trump está atrayendo mucha gente”, opinó la demócrata.
Minutos antes del comienzo del primer debate presidencial el propietario del restaurante plantó las reglas de un juego para beber: “Cada vez que un candidato diga ‘México’, levantaremos nuestras bebidas y diremos ‘¡salud!’”. El primer “salud” se gritó tras la oración “Nuestros trabajos están huyendo a México” pronunciada por el contendiente republicano. La gente levantó su cerveza al aire, bebió y rió.
Al finalizar el debate hubo un foro en el que tres ponentes fueron invitados para discutir la transmisión del evento. A lo largo del panel se habló sobre el tema de inmigración y el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Los comensales presentes incluso pudieron hacer preguntas acerca del debate y las propuestas de los candidatos estadounidenses.
En general, el primer enfrentamiento de Clinton y Trump fue considerado una victoria para la candidata demócrata.
“Muchos de los republicanos con los que hablo (…) te dirán que en realidad no les agrada Donald Trump, pero piensan que Hillary es peor. Ella no pareció ser una mala persona hoy y él sí”, dijo Hall.
Los demócratas siguieron el segundo debate desde Sereno Moreno Cantina, mientras que, para el tercero, organizaron un doble evento, tanto en este recinto como en Pinche Gringo BBQ.
La cantina cuenta con dos pisos y alrededor de las mesas hubo 10 pantallas de televisión sintonizadas a CNN. Muchas personas jóvenes se sentaron juntas, incluso con desconocidos, y se creó un ambiente amigable y divertido.
La comida mexicana era servida mientras que los estadounidenses portando playeras de Clinton y sombreros azules y rojos, esperaban con emoción el comienzo del último debate presidencial.
La campaña de registro de votantes fue considerada como un éxito por los organizadores.
“Hemos registrado como 300 personas en total en estos últimos meses. Más gente está saliendo para registrarse para votar (…) pero también para registrarse, trayendo amigos, porque sí, el voto es muy importante” mencionó Verónica Reyes.
La selección de los lugares para los mítines ha sido crucial para el éxito de los mismos.
“Elegimos nuestras ubicaciones específicamente porque queríamos que fuera un ambiente disfrutable; queremos que todos se sientan bienvenidos y cómodos. En cualquier evento que organizamos, ambos, republicanos y demócratas, e independientes y del Partido Verde, todos están bienvenidos; así que siempre elegimos una ubicación localizada en el centro y que sea neutral”, comentó Reyes.
El tipo de locales también depende del objetivo de Democrats Abroad de alcanzar especialmente a los jóvenes.
“Millennials y gente más joven en los Estados Unidos apoya a Hillary Clinton mucho más que la gente de mi edad. Ellos son el futuro de lo que yo llamaría políticas progresivas en los Estados Unidos”, mencionó Hall. “La diferencia es que Hillary y los demócratas representan políticas progresivas con visión del futuro, y los republicanos representan ideas conservadoras y atrasadas: ‘construyan un muro’.
México ha sido mencionado con mucha frecuencia por ambos candidatos estadounidenses, por lo que el interés por la política de nuestro vecino norteamericano ha aumentado.
“Estoy muy consciente de que lo que pasa en los Estados Unidos afecta gravemente lo que pasa en México. Estamos unidos al otro nos guste o no; ¡a mí me encanta!”, concluyó Doug Hall al finalizar la velada en Pinche Gringo BBQ.
El día de hoy, Democrats Abroad realizará una fiesta a propósito de la elección presidencial de Estados Unidos. Hoy sabrán si sus esfuerzos por conseguir votos a favor de Clinton habrán sido suficientes.
Elizabeth Téliz