Entre un mundo posmoderno, rodeados de distracciones todo el tiempo, ocupados entre la escuela, el trabajo y asuntos de la vida diaria, no somos conscientes de nuestro tiempo. 

Terminas el día y empiezas a recordar en qué se te fue, nos damos cuenta que hacemos muy poco en las 24 horas que tenemos y nos decimos a nosotros mismos que nos organizaremos mejor y al final se vuelve a repetir. 

Esto se vuelve un cuento de nunca acabar, hasta que un día alguien más te hace ver de una u otra forma lo valioso y escaso que es este recurso que todos poseemos, pero del que no somos muy conscientes y desperdiciamos durante mucho tiempo de nuestra corta vida. 

Escuchar a Ana Isabel Sarmiento, secretaria general de la UP IPADE, fue como un abrir de ojos, ya que nos habló sobre la “Gestión del tiempo” 

¿Qué es el tiempo? Una pregunta existencial que en algún momento de nuestra vida nos hacemos. Según Ana, es una magnitud física inventada por el ser humano para darle orden a los sucesos de nuestra vida. 

El paso del tiempo

Hay dos antiguas palabras griegas que hacen referencia al tiempo de distinta manera. 

Kronos, se refiere al tiempo de forma cronológica y Kairos se refiere a un “momento perfecto”, a tomar la oportunidad en el tiempo adecuado.
Ambos tienen sus limitantes o excesos, en el caso Kronos es la incapacidad de adaptarse a los cambios de época y se rechaza la idea del paso tiempo. En Kairos, el exceso lleva a querer acumular muchísimas experiencias y no vivir el tiempo con calidad. 

Es importante saber que el paso del tiempo cada quién lo percibe de distinta manera, es decir es subjetivo. Si tenemos presente esto en un equipo de trabajo, podemos lograr dirigir de mejor manera a cada uno de los integrantes. 

Sin embargo, a pesar de que el tiempo es subjetivo, posee características únicas de la que todos somos conscientes: 

  • Es un recurso atípico: no se compra, ni se vende. 
  • Equitativo: Todos tenemos 24 horas al día 
  • Inflexible: Solo tenemos ese número de horas al día, ni más ni menos. 
  • Insustituible.
  • Irrepetible

Partiendo de lo anterior y siendo conscientes de que es un recurso escaso, limitable e irrepetible, es importante entender que debemos de saber para qué usamos nuestro tiempo y cuáles son los motivos que nos mueven, pueden ser extrínsecos (el reconocimiento, la reciprocidad o el recibimiento externo) intrínsecos (satisfacción, plenitud y retos) o trascendentes (desarrollo e impacto).  

Finalmente Ana nos llevó a las siguientes conclusiones. La primera fue que para usar bien el tiempo debemos de reconocer a dónde vamos, qué queremos hacer y qué queremos conseguir; la segunda fue que solo el 20% del esfuerzo que ponemos en algo es lo que importa; y la última pero no menos importante fue que debemos de evitar interrumpir nuestras actividades nosotros mismos. 

La importancia de la gestión

Por otra parte Alejandra Sánchez, coordinadora de proyectos en el área de  Compromiso Social en la UP, nos habló sobre las herramientas que necesitamos para la gestión de proyectos. 

Lo primero que necesita un proyecto son personas, sin ellas es imposible tan siquiera concebir la idea, después para que este sea exitoso es necesario plantearlo bien para que se implemente o ejecute de forma correcta. Por último están los recursos económicos, la mano de obra, materia prima, etc. 

Ya que se cuenta con todo lo anterior, empieza a ejecutarse. El desarrollo de un proyecto se puede dividir en 5 etapas: 

  1. La formación. En esta primera etapa, se toma el contacto entre el equipo y los objetivos del proyecto. 
  2. Tormenta. Comienzan a surgir los conflictos en el equipo.
  3. Normativa. Se normaliza la situación y los conflictos se resuelven. 
  4. Actuación. El equipo se encuentra seguro, motivado y familiarizado con el proyecto. 
  5. Clausura. Se le da un cierre a todo,

Ya para finalizar nos dio una serie de herramientas para lograr una buena planeación y nos hizo mucho énfasis en tener presente que por muy buena planeación que tengamos, van a surgir imprevistos o situaciones inesperadas y es importante considerarlo. 

Ambas pláticas fueron en torno al tema de la gestión y no es coincidencia, en esta sesión del Seminario de Líderes aprendí que el saber gestionar es primordial para ser un buen líder, ya que si no sabemos organizar y gestionar nuestra propia vida, no podremos ayudar a los demás a hacerlo.

¡Hasta la próxima nota!