Este fin de semana los Cardenales de Arizona aseguraron su sexta victoria al hilo y son el único equipo invicto en toda la liga. El equipo de Glendale sueña con lograr ser parte de la lista selecta de franquicias que han logrado ganar cada uno de sus partidos en el año, sin contar pretemporada ni playoffs. El desafío de los Cardenales es aún mayor si se toma en cuenta que se adicionó un partido extra al calendario de la campaña regular de la NFL.
Echamos la vista atrás para conocer a las organizaciones que han conseguido temporadas inmaculadas en toda la historia de la liga.
Temporadas sin derrota antes de la unión de la NFL y AFL
Antes de la fusión de la NFL y la AFL en 1966, existieron varias organizaciones que no registraron derrotas en la temporada regular. En esa época los calendarios y las afiliaciones a la organización no estaban homologados, por lo que, en cada campaña fluctuaban la cantidad de equipos participantes y por ende la cantidad de partidos.
En el primer año de existencia de la entonces denominada Asociación Estadounidense de Futbol Profesional se consiguió la primera temporada de un equipo sin descalabros. Los ya extintos Pros de Akron lograron la proeza con un récord de 8-0-3. Posteriormente, fueron campeones en la campaña inaugural.
Los Bulldogs de Canton en 1922 y 1923, se convirtieron en el primer equipo en conseguir temporadas consecutivas sin derrota. En ambas ocasiones, lograron llevarse los campeonatos de la recién renombrada Liga Nacional de Fútbol (NFL por sus siglas en inglés). Pero en las dos campañas tuvieron empates, por lo que no fue una temporada perfecta.
En 1929, los Empacadores de Green Bay ganaron su primer campeonato en la historia. Tuvieron un balance de 12 victorias y 1 empate, pero no pudieron llevarse el campeonato de ese año, tras perder en el partido definitivo.
La primer franquicia en conseguir una campaña regular perfecta fueron los Osos de Chicago. Que en 1934, ganaron sus 13 partidos del año pero fueron derrotados en el partido por el título a manos de los Gigantes de Nueva York. El equipo de Soldier Field repitió la hazaña en 1942, en el marco de la Segunda Guerra Mundial; tuvieron récord de 11-0. De nueva cuenta cayeron en el encuentro más importante de todos, pero ahora en contra del equipo de Washington.
Los Delfines de Miami de 1972, la perfección hecha realidad
En la era de los Super Bowls, la primera y única organización en conseguir una temporada perfecta son los Delfines de Miami. La campaña de 1972 sería la apropiada definición de un año inmaculado, ya que arrasaron a su competencia en la temporada regular y en la postemporada.
Dirigidos por el legendario entrenador en jefe, Tom Shula, la franquicia de Florida acumuló una marca de 14-0. Es considerado como uno de los mejores equipos de la historia. Los snaps en los controles se dividieron entre el mariscal de campo Salón de la Fama, Bob Griese y Earl Morrall, que comandó al equipo durante la lesión del QB titular.
En ese ciclo, los Delfines tuvieron a dos corredores que lograron la marca de las 1000 yardas por tierra cada uno, Larry Csonka y Mercury Morris. La ofensiva estuvo amparada por una de las líneas más talentosas de toda la NFL. Era un equipo equilibrado, ya que en el otro lado del ovoide estaba la apodada «Defensa sin nombre», que sometía a los ataques rivales sin mayor sobresalto.
El ritmo en playoffs no decayó, lo que los llevó a derrotar a los Cafés y a los Acereros en el partido por la división y por la conferencia, respectivamente. Llegaban como amplios favoritos al Súper Tazón.
Cumplieron con todas las expectativas y vencieron al equipo de Washington con un marcador de 14-7, para convertirse en el campeón séptima edición del Trofeo Lombardi y en el primer equipo en ganar cada uno de sus encuentros del calendario, incluyendo postemporada.
Los «casi» perfectos Patriotas de Nueva Inglaterra del 2007
El segundo equipo de la AFC este en lograr un récord perfecto en temporada regular fueron los Patriotas de Nueva Inglaterra. Lo consiguieron en la temporada 2007, 35 años después de la gesta de sus eternos rivales los Delfines de Miami, en 1972.
El logro de la franquicia de Foxboro tuvo una resonancia mayor, al convertirse en el primer equipo en lograr una temporada regular invicta en el expandido calendario de 16 encuentros.
De la mano de Tom Brady y de Bill Belichick, en 2007, la franquicia del Gillete Stadium buscaba su cuarto anillo de campeonato en su historia. Al termino de la temporada regular, partían como amplios favoritos para llevarse la corona. Contaban con una plantilla abarrotada, que tuvo 8 jugadores en el Pro Bowl, entre los cuales se encontraban jugadores como: Randy Moss, Vince Wilfork, Mike Vrabel y Asante Samuel. A su vez, surgieron estrellas emergentes como el receptor abierto Wes Welker.
Vencieron contundentemente a los Jaguares de Jacksonville en el Divisional y en el partido por la Conferencia Americana, doblegaron a los Cargadores de Phillip Rivers y LaDainian Tomlinson.
Esta temporada fue parte de la dinastía de los Patriotas de Nueva Inglaterra, que perduró entre 2001 y 2019, que consiguió un total de 6 Súper Tazones. En esta campaña se prometía sumar otro campeonato a su vitrina, pero su poderío demostrado en temporada regular se vio truncado en el Super Bowl XLII.
Se toparon a Eli Manning, Tom Coughlin y a los Gigantes de Nueva York. Los Patriotas partían como favoritos absolutos, pero de manera totalmente inesperada fueron derrotados por el conjunto de la Gran Manzana 14-17. Este encuentro será recordado para la eternidad por la asombrosa e inaudita recepción de David Tyree en los últimos minutos del último cuarto.
