Esta tarde el Papa Francisco salió de la Nunciatura Apostólica en el papamóvil rumbo a la Basílica de Guadalupe para encabezar la misa que miles de fieles estaban esperando. Su discurso conmovió a las personas – a las presentes y a los que a través de la televisión seguían la transmisión- por ser un discurso humilde, lleno de esperanza y aún más para las personas que creían haberla perdido.
“Son tantas las situaciones que nos quitan la fuerza, que hacen sentir que no hay espacio para la esperanza, para el cambio, para la transformación”.
Su Santidad hizo referencia a la inseguridad que se vive en el país por lo que animó a los fieles a no perder la esperanza y más a las personas que han perdido a un hijo en manos de los criminales. Les aseguró que Dios siempre se acerca a sus corazones.
Recordó que en 1531 San Juan Diego fue elegido por la Virgen María como embajador para construir nuevos Santuarios. Él no se creía capaz, ya que decía no estar a la altura por no ser letrado ni pertenecer a ningún grupo importante. María, con todo su amor, le reitera que él sería su embajador. Con esto, el Sumo Pontífice habló de que todos somos necesarios e importantes a pesar de las diferencias sociales y económicas.
“Todos somos necesarios, especialmente aquellos que normalmente no cuentan por no estar a la altura de las circunstancias o no aportar el capital necesario…”.
El Papa Francisco sabe lo importante que es la Virgen de Guadalupe para los mexicanos. Dice que la Virgen Morena es un ejemplo de entrega a Dios y a sus hermanos. Además, recuerda que es nuestra Madre y ella está con nosotros. Invita a los fieles a no dejarse vencer por el dolor y la tristeza, por el contrario, invita a ser embajadores para seguir construyendo nuevos santuarios.
“El Santuario de Dios es la vida de sus hijos, de todos y en todas sus condiciones, especialmente de los jóvenes sin futuro expuestos a un sinfín de situaciones dolorosas, riesgosas, y la de los ancianos sin reconocimiento, olvidados en los rincones”.
Por otro lado, el Papa Francisco sabe que Twitter es, al igual que otras redes sociales, un espacio importante para los jóvenes por lo que emite mensajes para ellos.
Al terminar la eucaristía, Su Santidad visitó el camerín donde pudo admirar a la Virgen de Guadalupe. Frente a la imagen, colocó flores amarillas para después comenzar su rezo que duró aproximadamente 20 min.
Tiempo después, se dirigió nuevamente a la Nunciatura Apostólica. Ahí recibió a un grupo de niños que bendijo dándoles un beso en la frente para así concluir con las actividades del día de hoy. Unos minutos más tarde, cuando todos lo creían dormido, salió para dar unas últimas palabras al pueblo mexicano, con las que recordó la importancia de encomendarse a la Virgen María. Con el humor que lo caracteriza bromeó: “¿Están cansados? Bueno, podemos seguir hasta las 4:00 de la mañana”.
Karla Horton
