Sin duda la conoces, Autorretrato 1889 es una de las obras más representativas de Vincent Van Gogh; siendo el principal vistazo a la apariencia real del artista. Sin embargo, desde 1970 se dudaba de la autenticidad del cuadro ya que tanto los colores como la técnica no correspondían al artista holandés.

El retrato muestra a Van Gogh melancólico, sobre un fondo azul y amarillo y durante años vivió bajo la duda de si era real o una muy buena falsificación. El Museo de Van Gogh dio la declaración el pasado lunes acerca de la autenticidad de la pintura. 

[twitter id_twitter=»https://twitter.com/vangoghmuseum/status/1219186575826923520″]

El Museo Nacional de Oslo (Noruega) tuvieron la duda en 1970 sobre si el cuadro era realmente una obra creada por el artista. Más de 40 años después, en el 2014, el Museo de Van Gogh decidió poner fin a las especulaciones y traslado el autorretrato a sus instalaciones.

A partir de ese momento se tardaron casi seis años en poder descifrar la verdad detrás de aquella postura melancólica y pinceladas poco comunes. 

Sin embargo, mediante rayos X y otros estudios se pudo confirmar la autoría del cuadro. Gracias a las cartas con Theo se pudo hacer la relación de la época en la que se pintó y el momento en el que estaba el artista. Fue en el verano de 1888 en el que Van Gogh, intentando salir de su crisis, pintó su autorretrato en el psiquiátrico de Saint-Remy. 

Un Van Gogh con mucha historia

En el año de 1910 el Museo Nacional de Oslo adquirió la obra a un coleccionista de Paris. El cuadro se gano el título de ser el primer autorretrato de Van Gogh en una colección pública. La pintura muestra tonos de colores que el artista nunca había usado, menos vivos a los que utilizaba usualmente.

Esto y el estilo de pincelada, más gruesa de lo acostumbrado, le da una sensación de inacabado. Además se descubrió el uso de espátula para aplanar ciertas partes de la pintura, técnica nunca antes vista en un cuadro de Van Gogh. 

La única explicación para la diferencia de colores y técnica es que durante ese periodo de tiempo Van Gogh se encontraba dentro de una crisis depresiva y psicótica. Se espera que la obra regrese en los próximos meses a su lugar en el museo noruego donde será exhibida en la exposición permanente junto con otros contemporáneos del artista.