El otoño está a la vuelta de la esquina, y si no lo creen pregúntenle a las cafeterías que ya empezaron a vender los famosos «Pumpkin Spice Latte». Hablando de otoño, distintas revistas de moda han nominado al chaleco como la prenda de la temporada.
Es por esto que debemos comenzar a reinventar nuestro guardarropas acorde a la estación otoñal. No pueden faltar unas que otras básicas de cuello de tortuga de tonalidades nude, unas botas que sirvan como statement de tu outfit y obviamente, la prenda de la que vamos a hablar en esta nota, el chaleco: la prenda del otoño.
Pero primero te daremos una clase de historia de la moda exprés, ¿De dónde salieron estas prendas tan elegantes?
¿Y dónde quedaron las mangas del chaleco?
No es ninguna novedad que el chaleco ha regresado lento pero seguro a las primeras planas de las revistas de moda. Este comeback se ha podido notar en los outfits que usan personas que mueven el mundo de la moda. Kendall Jenner, Bella Hadid o incluso Matilda Djerf, todas ellas lo llevan.
Y aunque tal vez le asocies con el estilo moderno y desenfadado, su origen puede ser rastreado al siglo XVII. El Rey Carlos II de Inglaterra introdujo los chalecos como parte de la «correcta vestimenta» para hombres.
Entonces, si fue hecho para hombres ¿Cómo comenzaron a usarlo las mujeres? Fue nada menos que un símbolo de rebelión por parte de las mujeres francesas del siglo XVIII. En el siglo XIX empezaron a diseñar chalecos para mujeres.
Acorde al Instituto de Moda y Tecnología de Nueva York, esta pieza de indumentaria ya se habría convertido en un símbolo de inconformidad en cuanto a la equidad de género para este entonces.
¿Cómo llevar un chaleco y no morir en el intento?
Ahora sí, ya que tienes el famosísimo contexto. Te contamos como incorporar esta pieza textil en tus outfits del día a día. Afortunadamente, el chaleco tiene un sinfín de variaciones. Puedes rotar tu ropa para darle un look más formal sin la necesidad de usar un traje sastre, o bien, unos jeans de corte suelto y llevar el chaleco como un top sin mangas, para darle un toque relajado a tu atuendo.
Otra manera de llevar el chaleco podría ser con unos pantalones del mismo color o tono de este, para crear una base monocromática de tu outfit.
Si quieres darle un toque de color puedes agregar accesorios como una sandalia de plataforma o un bolso colorido. No podemos dejar de lado el estilo oversize que vemos en colecciones de marcas de lujo.
También pensamos en marcas más accesibles, que han sacado variedad de siluetas y versiones de esta prenda que define los guardarropas este otoño.
