¿Alguna vez te has puesto a pensar qué pasa con todos esos aparatos electrónicos que ya no usas o dejaron de servir? Si respondiste que no, deberías hacerlo, porque toda esa basura electrónica que producimos suponen un problema más grande de lo que podría parecer.

¿Qué es la basura electrónica?

Comencemos por definir qué es la basura electrónica. Se le llama basura electrónica a todos aquellos dispositivos eléctricos o electrónicos que han llegado al final de su vida útil y por lo tanto, son desechados. Fácil, ¿no?

En cualquier caso, ahí les va una lista de todo aquello que se considera dentro de esta gama de dispositivos y aparatos, para que no queden dudas:

  • Refrigeradores, congeladores y otros derivados.
  • Equipos de informática y telecomunicaciones.
  • Aparatos electrónicos de consumo y paneles fotovoltaicos.
  • Televisores, monitores y pantallas.
  • Lámparas y linternas LED.
  • Máquinas expendedoras.

¿Por qué es un problema?

Seamos directos. Resulta ser que al año se generan aproximadamente 50 millones de toneladas de chatarra tecnológica. Por ejemplo, en el 2018, mundialmente se generaron 48.5 toneladas de este tipo de desechos. 

Y el problema no llega hasta ahí. No estamos reciclando suficiente basura electrónica. ¿Quieres saber qué tan poco realmente se recicla? Pues fíjate que solo llegamos a reciclar 20 por ciento de estos residuos. 

Si seguimos por este mal camino por el que andamos, la ONU teme que llegaríamos a producir más de 120 millones de esta chatarra residual tan solo para el 2050. Si las 50 toneladas sonaban a exceso, imagínate generar más del doble. 

Para colmo, la problemática no solo engloba la producción y desecho de estos productos en enormes cantidades. Lo que pasa es que esta basura electrónica habitualmente contiene cadmio, plomo, óxido de plomo, antimonio, níquel mercurio. Estos elementos son capaces de no solo contaminar cuerpos de agua como los mares, ríos o lagos, sino también de producir gases cuyo efecto podría desequilibrar los ecosistemas del planeta.

Entonces, ¿todo está perdido?

Todavía no, pero es urgente actuar ya mismo. Es necesario alargar la vida útil de nuestros productos, procurar su cuidado y mantenimiento. Además, no se vale estar comprando aparatos así porque sí, compremos solo lo que nos haga verdaderamente falta. Eso de comprar 4 pantallas planas Ultra 4K Pro Max S Plus no está nada bien. 

Más importante, reciclemos aquellos productos eléctricos que ya dieron todo lo que tenían que dar. ¿Que cómo se hace eso? Por ejemplo, podrías entregar el aparato a desechar en el mismo establecimiento donde planeas comprar el nuevo. O quizá podrías acudir a alguna empresa que se dedique al reacondicionamiento electrónico.

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También es una buena idea ser compartidos y prácticos. Si tienes algún dispositivo o aparato que entre en la lista de más arriba, aún sirve y ya no lo utilizas. Piensa en ese amigo al que se le rompió la pantalla del celular, en la tía que sigue viendo la novela en una tele viejita, en tu vecino que siempre te anda pidiendo una vela cuando se le va la luz. Si pensamos en el otro y cedemos lo que ya no nos sirve, los deshechos producidos podrían descender considerablemente.

Un poquito de polémica

Si eres fanático de Apple, tal vez hayas escuchado ese popular rumor de que el iPhone 12 no incluirá accesorios como audífonos o cargador a la pared, entre otros motivos, “para combatir la producción de basura electrónica”. Chequen lo que José Antonio Pontón nos contó al respecto:

“Apple siempre ha sido punta de lanza en cuestiones de marketing, junto con Disney. Ellos fueron los primeros en quitarle el CD Rom a las computadoras, y actualmente ninguna computadora o laptop tiene CD Rom. Ya te vale, ya nadie compra CDs. Después Apple quitó el peurto jack de 3.5 mm en sus celulares. Y se hinchó de dinero vendiendo adaptadores. Las demás marcas se dieron cuenta y ahora nadie le pone este puerto a sus teléfonos.

Nos lo van a vender como que no necesitamos los accesorios porque ya tenemos muchos en casa, pero en realidad lo que van a hacer es vender estos accesorios por separado. Ellos vieron un negocio multimillonario en los adaptadores, cables y accesorios extra. Si ahora quieres cargadores, conectores, audífonos oficiales, originales y “certificados”, tendrás que pagar más y comprarlos con la marca.

Van a decir que lo hacen para combatir la producción de basura electrónica, pero lo que están haciendo es agrandar el mercado para terceros que venden cables certificados, fundas certificados, etc. Es marketing totalmente. Va a haber mucha más venta de cables con esta estrategia que antes”, concluye José Antonio.

¿Tú qué opinas? ¿Realmente Apple tiene intenciones puras y ecológicas o solo quiere vaciar aún más nuestros bolsillos con su nueva estrategia? 

¡No olvides reciclar tus desperdicios electrónicos!

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