El cine está basado en relatos de la realidad dramatizados con el fin de entretener. La cinematografía es considerada como una «expresión artística de la emoción» y funge como una representación de los sentimientos de los humanos. En el cine de terror, los traumas de la sociedad se manifiestan y se quedan en el «inconsciente colectivo», que a la postre, la psiquiatría se encarga del estudio de ellos.

Conversamos con el psiquiatra Fernando Espí Forcén, autor del libro «Monsters, Demons y Psychopaths: Psychiatry and Horror Film», publicado en 2016, de la editorial «Routledge». En el que aborda la relación perceptiva de las psiquiatría, por medio del cine de terror. El Dr. Fernando es originario de Murcia, España; pero reside en la ciudad de Boston, en los Estados Unidos.

Actualmente, labora en el Massachussets General Hospital, institución afiliada a la Universidad de Harvard y se encarga de la unidad psiquiátrica de pacientes hospitalizados. En este artículo, ahondaremos en las tesis de su publicación.

Las películas del Siglo XX ligadas a etapas históricas

Su libro se clasificó por géneros de terror y por tipos de monstruos, en su contexto histórico y social. Al redactar el libro, se dio cuenta que dependiendo la época en la historia de la humanidad, ciertos géneros eran utilizados con mayor prominencia, como un reflejo de lo que estaba ocurriendo en la realidad. Según el psiquiatra, los cineastas expresaban los miedos de la sociedad por medio de los personajes en las películas.

Los monstruos se pusieron muy de moda en los años 30 y 40, en aquella época, el pensamiento sobre la locura en la psiquiatría estaba muy reflejado en este cine. Te das cuenta que hay muchos conceptos psicoanalíticos, que están indirectamente reflejados. (El psicoanálisis) Era la psiquiatría del momento.

Dr. Fernando Espí

En el psicoanálisis de Sigmund Freud, la personalidad está dividida en tres estructuras: el Yo, el Superyó y el Ello. Según Freud, el Ello se basa en los instintos primitivos y en el placer; el Yo tiene la función de expresar, manejar y realizar los impulsos del Ello; en el Superyó se encuentra nuestra moral.

En esos años existía un miedo latente a la ‘dementofobia’, que se define como «el miedo de las personas de perder la cabeza o caer en la locura».

El monstruo es el reflejo del Ello, porque vemos sus instintos, que son inaceptables para nosotros en la sociedad, pero que se manifiestan a través del monstruo. Entonces, lo que hace el monstruo […] son cosas que son inadmisibles para nosotros por nuestro Superyó. Al verlo a través de él, sufrimos la catarsis.

Dr. Fernando Espí

Ejemplos de esta tendencia de demostrar la locura serían largometrajes como: «El Dr. Jekyll y Mr. Hyde» y «Mad Love».

Entre 1950 y 1970, en el auge de la Guerra Fría, existía un miedo palpable a una tercera guerra mundial nuclear y a una posible invasión del comunismo. De lo anterior surgieron muchas películas de invasión alienígena o de seres supernaturales, como símil del miedo a una ocupación rusa o de un cataclismo atómico, según el Dr. Espí. «La Guerra de los Mundos», «El Mundo en Peligro» y «El Día que Paralizaron la Tierra», son cintas que manejan este tipo de temática.

Temáticas de la psiquiatría relacionadas al terror

El Dr. Fernando Espí, también, ha encontrado relación entre largometrajes y temores de la sociedad en épocas contemporáneas. Situaciones de pánico mundial, como la pandemia por Covid-19 actual o desastres naturales o económicos, han generado una nueva serie de temáticas en las películas de terror.

Las películas de zombies han sido bastante famosas en tiempos en los que hay caos en la sociedad. Después de la crisis económica del 2008 hubo muchas películas de zombies. La gente tiene una fantasía de resetear a la sociedad. Pasa ahorita con el Covid, porque se han puesto de moda las películas de infecciones, porque es el miedo en la sociedad hoy en día, como es el caso de la película de «Contagio».

Dr. Fernando Espí

En los meses y años posteriores a la crisis mundial del 2008, se estrenaron películas de zombies o de muertos vivientes como: «Zombieland», «Resident Evil – Ultratumba», «Devil’s Playground», entre otras.

En las películas de posesiones demoníacas muchas veces lo que ves es un trauma, que se expresa por la posesión y que nosotros en psiquiatría se denominaría un trastorno conversivo. Son síntomas psicológicos y motores relacionados con un trauma inconsciente.

Dr. Fernando Espí

Según Medline, un trastorno conversivo es la aparición repentina de síntomas físicos y mentales, que suelen surgir de un conflicto psicológico y que no pueden ser diagnosticados por un médico.

Fernando cree que todo lo que nos aterra en como sociedad, el cine de terror servirá como vehículo para expresar ese temor. En su libro, desglosa a mayor detalle cada uno de los géneros y su relación con el contexto en ese momento.

La psiquiatría en el cine

El cine de terror y el cine en general busca contar historias por medio de la distorsión de la realidad para generar sentimientos y entretenimiento en el espectador, según el Dr. Espí. Por lo que, se entiende que existe una brecha entre la fantasía relatada en las películas y en la realidad.

El cine de terror demuestra la percepción inconsciente de la sociedad sobre la enfermedad mental. Pero no significa que todas personas que padecen estas enfermedades, se comportarán de dicho forma.

Sí existen películas que hacen un reflejo bastante bueno de lo que podría ser un psicópata. Por ejemplo, la película de «Henry, retrato de un asesino», crea una descripción bastante real de lo que es un psicópata.

Dr. Fernando Espí

Para Fernando, Norman Bates, personaje principal de Psicosis, muestra conductas representativas de una persona que sufre esquizofrenia y con una psicosis. Lo anterior lo determinó al observar los patrones de acción de Norman, como es tener a su madre muerta en su sótano, su interacción con las otras personas y las voces que escucha constantemente.

En «Una Pesadilla en Elm Street» ves una serie de niños traumatizados […] que empiezan a tener pesadillas, que es algo típico del Trastorno por Estrés Postraumático, que son pesadillas del asesino. Son películas que demuestran reflejan patologías mentales de una forma interesante.

Dr. Fernando Espí

El Dr. cree que en películas, como «El Silencio de los Inocentes» y «El Resplandor», se pueden armar casos de estudio de los protagonistas y coprotagonistas de dichas producciones. Ya que para él son reconocibles los métodos de acción representativos de diversas aflicciones mentales. Para comprender más sobre la representación de enfermedades mentales en el terror, les volvemos a recomendar el libro.

La psicosis cinemática en la psiquiatría

Un fenómeno diferente relacionado a las películas de terror, es la psicosis cinemática. Que en lugar de representar solo traumas existentes, también genera nuevos miedos en el espectador, que antes de ver la película no tenían.

Un ejemplo de ello es la película de «Tiburón». Antes la gente no tenía miedo a estar en la playa y no le tenía necesariamente miedo a los tiburones […] a raíz de ver la película la gente empezó a tener miedo de meterse a lo profundo del mar, por si llegaba a salir el ‘gran tiburón blanco’.

Dr. Fernando Espí

Un nuevo temor es introducido a la sociedad, en algunos casos de forma masiva. El Dr. otorgó otros ejemplos con películas conocidas en el género, como el «Exorcista».

Pasó algo parecido (a «Tiburón») la gente no tenía mucho miedo a los demonios en aquella época. Gracias a la película del «Exorcista» las personas empezaron a tener miedo a las posesiones de demoniacas y a la «tabla Ouija».

Dr. Fernando Espí

Si desean conocer a profundidad sobre el tema, les recomendamos leer el libro, que puede ser adquirido en plataformas como: Amazon, eBay y en formato eBook, en Google Libros.